En este momento del futbol argentino, en el cual son más los fracasos que los éxitos, podemos basar la esperanza de volver a los primeros planos no solo en Messi, sino también en 3 nombres propios: Javier Pastore, Ricardo Álvarez y Erik Lamela. Ninguno de los 3 es un enganche clásico tipo Bochini o Riquelme, son más bien parecidos al estilo de juego de Pablo Aimar. Son pensantes, ven espacios que a otros les cuesta ver, pero tienen una gambeta mas en velocidad y hacia adelante, que pausa o toque para el costado. Ojo, no por una cosa dejan de lado la otra. Los 3 pueden ser los socios que el 10 argentino necesita.
Pastore, el de mas experiencia se lanza hacia una nueva apuesta: el futbol francés. Claramente en su decisión peso la continuidad sobre la exposición. Igual no cayó en un equipito, el PSG quiere volver a codearse con los grandes de Europa y espera que el ex Huracán sea la llave para eso. Esa continuidad que busca en Le Championnat, todavía no la encontró en la selección. A pesar de mostrar buena conexión con Messi, no tuvo los minutos suficientes como para despejar las dudas . Con sus 22 años, tiene 1 mundial encima y 2 temporadas en el Calcio (una siendo la figura del equipo). Sabella deberá hacerle un lugar entre los 11.
El ex fortín, Ricky Álvarez (23 años) es quien le sigue en cuanto a años jugados en primera. Si bien no destelló apenas apareció en, explotó y mostró sus condiciones en los últimos 12 meses jugados en el equipo de Liniers. Una lesión grave luego de su debut en 2008 le jugó en contra, pero le sirvió para hacerse fuerte. Más que un enganche, es un excelente caballero de compañía. El clásico conductor puede apoyarse en él al momento de crear o cuando este “cansado”. Su carísima transferencia al Inter italiano es la máxima presión que puede tener. En los amistosos y Supercopa italiana fue titular y rindió. Hay que esperar al inicio de la temporada para ver si esta a la altura del futbol italiano y de la selección nacional (ya fue citado por el DT, hay que ver donde lo ubica).
Por último, el más chico de los 3 y el de menor roce en primera, Erik Lamela. El ex 10 riverplatense hoy en la Roma, tiene poca experiencia, pero fuerte: se bancó ser el conductor de un River que peleó el descenso, nada fácil para un chico de 19 años. Se lo aguantó demostrando personalidad para esos momentos duros de la historia millonaria. Es el que más se parece al enganche clásico, pero tiene un amague difícil de descifrar para cualquier rival. Es cierto, le gusta tener mucho la pelota en sus pies, por eso el estar en Italia le irá sacando esa manía, para saber soltar el balón en el momento justo y no perderlo. Si termina de pulir esos detalles de niño crack, parece ser el de mayor futuro de los 3.
Zurdos o derechos, los 3 practican un fútbol de buen pie, exquisito, más conocido como fútbol champagne. Si Sabella sabe juntar a Pastore, Ricky y Messi, vamos a tener que prepararnos para ver juego de alto nivel en la ofensiva de la selección Nacional. Y si a esos 3 le sumamos a Lamela esperando en el banco para sumar experiencia, el tiki-tiki nos espera en Brasil 2014.
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